Manifiesto
Un país para invertir
Colombia
Es uno de los cuatro países de América Latina, junto México, Chile y Costa Rica, que hacen parte de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), el exclusivo grupo que trabaja en pro de maximizar el crecimiento económico de los países miembros y apoyarlos en su desarrollo.
Es una carta de garantía que muestra a Colombia como un país que se recupera de las crisis, referida sustancialmente al impacto de la pandemia del Covid-19, que afectó a todos los sectores y países del mundo.
El auge inmobiliario
Por otra parte, el sector de la finca raíz seguirá siendo un buen negocio en todas sus formas. Un síntoma es que en el primer semestre del 2022 se vendieron en el país 119.409 viviendas nuevas, es decir, 5 % más de lo registrado en el 2021 durante el mismo periodo.
En el balance económico, publicaciones como Bloomberg Línea, han consultado a expertos para ratificar el diagnóstico y lo que le espera a Colombia. Por ejemplo, Shirlhey Sánchez, CEO de Colombia Proptech, ha dicho que “el sector inmobiliario ha sido considerado como un elemento de reserva de valor ante situaciones volátiles de la economía, resaltando que los bienes inmuebles mantienen el poder adquisitivo del capital al otorgar parte de la presión inflacionaria o incremento generalizado de precios en forma de apreciación del capital”.
Incluso, es clara en advertir que “la línea residencial en bienes raíces se presenta hoy como una oportunidad, sea en el dinamismo de adquisición como vivienda propia o como inversión para renta”. Es una manera de inversión práctica y segura.
Foto tomada por: Guillermo Rodríguez
Es evidente que el mercado inmobiliario colombiano está en auge, en el despertar tras lo ocurrido entre 2020 y 2021 por las restricciones y la parálisis provocada por la pandemia. No en vano, se ha incrementado la construcción de nuevas viviendas y se avanza en la compra y venta de viviendas usadas. Es rentable y se valoriza, es un mercado estable y dinámico.
Además, el país ha sido siempre un escenario favorable para la inversión extranjera. Lo que garantiza ser una democracia estable, sin ningún tipo de sobresaltos y menos de la dimensión de lo que ocurre en otros países de la región. En esa línea están también las decisiones de las autoridades económicas, avaladas por organismos como la OCDE, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, que permiten establecer que en Colombia la inversión es segura.
Garantías para el inversionista
A esto se suman los controles legales y la formalidad jurídica, que permite que los negocios que se realicen tengan las garantías suficientes para quien compra y vende. Esa fortaleza jurídica es parte de los diversos tratados de libre comercio que tiene vigentes el país. Entre los más trascendentales, Colombia tiene tratados con Estados Unidos, Unión Europea, Reino Unido, Canadá, Corea del Sur y México.
Colombia tiene más de 50 millones de habitantes, localizados en el extremo occidental de Suramérica, con costas sobre el Pacífico y el Caribe, una alta concentración sobre la Cordillera de los Andes y poblaciones en la llanura. Cuenta con ciudades icónicas para el turismo de descanso, médico y de negocios, como Santa Marta, Cartagena, Bogotá, Cali, Barranquilla y Medellín, con una importante infraestructura en industria turística.
En contravía a lo que ocurre en otras latitudes, el país no sufre el impacto de la guerra en Ucrania en el sector energético, por su condición de tener altos recursos naturales y de infraestructura en este sector. Además, como país con un interesante nivel de explotación petrolera y gasífera, se ha visto beneficiado por los precios internacionales.